Hace un rato la maca me dijo que iría a la cocina (que raro) pero que no tenía hambre y pensé.
De verdad que soy hambriento y no me apoyo en ninguna otra razón para comer, a pesar de que a veces me crea el cuento de guatón y por una supuesta y evidente humorada coma, pero de verdad es porque tengo hambre. Pero pero a veces sucede, dan ganas de comer sin tener hambre; anciedad, ocio, desorden de horario, exceso ¿falta? de sueño...
Cuando me pasa eso simplemente no me da para ir por comida sino que cambio el hambre q no existe por la sed q se va más rápido. Ahora mismo, voy por una Coca-Cola.
lunes, 17 de diciembre de 2007
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